Las acciones que hacemos día a día tienen un impacto en todo lo que nos rodea, en las personas y en la naturaleza. Este impacto no lo podemos evitar, pero sí lo podemos reducir. Tal vez te cuestionés si una pequeña acción que hagás en algún momento del día puede generar algún efecto en tu entorno y la respuesta es: Si, cada acción cuenta!
¿Por qué es tan importante tu accionar individual? Porque los seres humanos imitamos el comportamiento del vecino y si vos hacés algo que contribuya con el medio ambiente, es probable que una amiga te copie y así sucesivamente, generando un cambio colectivo. Todo comienza con una persona y una acción.
Si ya decidiste tomar acción y no sabés por dónde empezar, te dejamos una lista de tips para proteger el ambiente desde cualquier lugar en donde te encontrés:
- Convertí tu cocina en una amigable con el medio ambiente: reemplazá tu esponja por una de lufa y tu detergente por uno biodegradable.
- Acordate de llevar una bolsa reutilizable al supermercado en vez de pedir una de plástico. Las bolsas de plástico no son reciclables en la zona y generan muchísima contaminación ya que se mantienen en la tierra por 150 años (o más?).
- Compostá tus restos de comida. Chequeá nuestra guía de compostaje para generar tu propio abono orgánico para tus plantas de forma gratuita.
- ¡Si no lo necesitás, no lo comprés! Estamos acostumbrados a consumir sin pensarlo, pero no tiene por qué seguir siendo así. Acordate de esta nota de blog cuando estás por comprar algo y preguntate realmente si es algo que necesitás o no.
- ¡Si lo compraste, reutilizalo o reciclalo! No te olvidés de reciclar todo el plástico (1, 2 y 5), metal, vidrio y tetrabrick que comprás.
- Utilizá protector solar libre de químicos para proteger el océano y su vida marina.
- Comprá productos a granel o llevá tu envase para reducir tu consumo de plástico.
Te recomendamos que implementés algunas (o todas) de estas opciones para reducir tu impacto ambiental y asegurarnos un futuro sano y sostenible.
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Your actions matter
Our daily actions have an impact on our surroundings, people and nature. We can not avoid this impact, but we can reduce it. Maybe you have asked yourself if a small action can generate change in the environment and the answer is: yes, every action counts!
Why is individual action so important? Human beings imitate the behaviour of others. If you do something that contributes to the environment, maybe a friend will follow you and so forth, thus creating collective change. Everything starts with one single person and one single action.
If you have decided to take action and you do not know where to start, here you have a list with some environmental conservation practices you could adopt:
- Turn your kitchen into an environmentally friendly one: replace your sponge with a luffa one and your detergent with a biodegradable one.
- Remember to bring a reusable bag to the grocery store instead of asking for a plastic one. Plastic bags are not recyclable in the area and they generate a lot of pollution since they remain on the earth for 150 years (or more?)
- Compost your food scraps. Check out our composting guide to generate your own free organic compost for your plants.
- If you don’t need it, please don’t buy it! We are used to consuming without thinking, but it does not need to continue being like that. Remember this blog note when you are about to buy something and ask yourself if it is something that you really need.
- If you bought it, reuse or recycle it! Do not forget to recycle all the plastic (1, 2 and 5), metal, glass, and tetrabrick that you buy.
- Use chemical-free sunscreen to protect the ocean and its marine life.
- Buy products in bulk or bring your own container to reduce your plastic consumption.
We recommend that you implement some (or all) of these options to reduce your environmental impact and ensure a healthy and sustainable future.