-English below-
Hoy celebramos el 50 aniversario del Día de la Tierra. Con tiempo en nuestras manos para reflexionar, queremos hablar sobre este complejo planeta en el cual vivimos y la necesidad de un cambio de mentalidad para poder seguir habitándolo y coexistiendo con sus complejidades y las nuestras.
Es instintivamente natural pensar que el crecimiento es algo bueno. Queremos que nuestros hijos crezcan, que nuestras plantas crezcan, también que nuestros ingresos crezcan. Inconscientemente buscamos siempre este tipo de desarrollo. Sin embargo, hay un momento donde el crecimiento se vuelve un factor negativo y aquí es cuando nos cuesta entenderlo. Si dejamos que algo crezca de manera desmedida puede terminar destruyéndose a sí mismo o a lo que lo rodea. La obsesión que tiene la humanidad con el crecimiento como sinónimo de progreso puede que esté un poco (bastante) errada y puede ser una mentalidad que tengamos que cambiar, cueste lo que cueste.
El Planeta Tierra es un sistema complejo y nosotros -los humanos- somos una parte de él. No somos su cáncer, no somos su salvadores, simplemente somos parte del mundo en el cual vivimos. Nuestro rol es formar parte del ecosistema sin destruirlo. El papel que debemos desempeñar incluye entender esta complejidad y coexistir con ella.
Si de algo nos dimos cuenta en estas últimas semanas es que podemos vivir sin utilizar obsesivamente autos y aviones. Podemos reducir nuestro consumo drásticamente. Los gobiernos pueden implementar medidas tajantes para frenar lo que sea que esté sucediendo y los ciudadanos pueden entender y aceptar las regulaciones por el bien común. El crecimiento económico no es lo único de lo cual dependemos y hay crecimientos que deben ser frenados por el bien colectivo. Pudimos cambiar nuestra mentalidad en este caso, entender y actuar en consecuencia.
El Planeta Tierra necesita que todas sus partes funcionen de una manera correcta, que coexistan en armonía, es el momento de comprender la complejidad, el crecimiento no siempre determina un progreso, un bien común. Cuando frenamos siempre hay costos, pero a largo plazo, los beneficios los superan ampliamente. Se pierden empleos y se crean empleos nuevos, cierran emprendimientos y surgen emprendimientos nuevos. Eso es lo que llamamos una transformación. Ahora que sabemos que podemos transformar nuestras acciones y a nosotros mismos, utilicemos este día para reflexionar sobre cómo podemos frenar el crecimiento de la contaminación de los mares, ríos y tierra.
Hoy es el Día de la Tierra, un día que ha inspirado a muchas personas a transformar su mentalidad y así cambiar el planeta. Queremos comprometernos a celebrar este día todos los días por el resto de nuestras vidas. Esperamos que todos los que nos leen y nos siguen quieran formar también parte de este compromiso.
…
Earth day is every day, everywhere!
Today we celebrate the 50th anniversary of Earth Day. With time in our hands to reflect, we want to talk about this complex planet in which we live and the need for a change of mentality in order to continue our existence and coexistence with its complexities (and ours).
It is instinctively natural to think that growth is a good thing. We want our children to grow, our plants to grow, and also our incomes to grow. Unconsciously, we always seek this type of development. However, there are times when growth becomes a negative factor and this is when we find it hard to understand. If we let something grow excessively, it can end up destroying itself or its surroundings. Humanity’s obsession with growth as a synonym for progress may be a little (quite) wrong, and it may be a mindset that we have to change whatever the cost.
Planet Earth is a complex system and we, humans, are a part of it. We are not its cancer, we are not its saviors, we are simply part of the world in which we live. Our role is to be part of the ecosystem without destroying it and this includes understanding its complexity and coexisting with it.
If we have realized something during these past few weeks, it is that we are able to live without cars and planes, we can reduce our consumption drastically, governments can implement strict measures to curb whatever is happening, and citizens can understand and accept regulations for the common good. We also learned that economic growth is not the only thing on which we depend on. There is a type of growth that must be stopped for the common good. We were able to change our mindset in this case, understand and act accordingly.
Planet Earth needs all its parts to work correctly, to coexist in harmony. It is time to understand the complexity, growth does not always determine progress. There are always costs associated when something comes to a halt, but in the long run, the benefits far outweigh them. Jobs are lost but new jobs are created, businesses close but new businesses emerge. It’s all part of dynamic transformation. Now that we know we can transform ourselves and our actions, let’s use this day to reflect on how we can stop the growth of pollution of the seas, rivers, and land.
Today is Earth Day, a day that has inspired many people to transform their minds and thus, change the planet. We want to commit to celebrating this day every day for the rest of our lives. We hope that all those who read us and follow us want to be part of this commitment as well.